Ésta ha sido una de esas semanas en las que necesitas realmente un fin de semana reparador. Ha sido muy intensa, muy bonita pero con muchas cosas a tener en mente y que hacer. Fijarse como meta un par de días de tranquilidad ayuda bastante y eso justo ha sido lo que he hecho.
Y para estos dos días 5 planes a elegir…
Como ya llegó el verano, es hora de darle color a toda tu vida y no sólo a tu armario. Redecora tu casa, unos cojines, flores, pequeños detalles que llenen de vida tu hogar…
Me parece preciosa la idea de colgar un pañuelo a modo de tapiz, un lienzo en movimiento que es puro verano:
Sal a comer con amigas, disfruta del buen tiempo, de las largas charlas en las terrazas, de la brisa, de los días que nunca acaban…
Leer. En libro, en papel, disfrutando de su olor, de su tacto…Antes devoraba libros, ahora tardo una eternidad en terminarlos. Es una costumbre que quiero retomar y voy a empezar este mismo fin de semana…
Cambia de aires. Una escapada a la playa, comer a la orilla del mar, sentir la brisa el ruido de las olas… da la vida. Si eres de campo, una buena caminata en plena naturaleza pero desconecta, olvídate de todo, apaga el teléfono y disfruta de la vida…
Si no puedes escaparte, disfruta de tu hogar. Haz esas cosas que no puedes hacer de lunes a viernes, sal a tu terraza, cuida de tus plantas, ponte a cocinar sin prisas, túmbate en tu cama a leer…
Porque el fin de semana se inventó para eso, para descansar y disfrutar de la vida…
Besos!!
