Paloma Sánchez- Garnica ha ganado el Premio Planeta en su edición número 73, celebrada el pasado 15 de octubre con su novela Victoria.
En su discurso, muy emocionada, se entrevén los valores y principios que siempre acompañan sus páginas y que posiblemente tengan buena parte de la culpa del éxito de sus tramas entre los lectores.
El pasado 15 de octubre se celebró la edición nº 73 del prestigioso Premio Planeta en la que la escritora madrileña Paloma Sánchez-Garnica logró el preciado galardón con su novena novela, Victoria. Después de quedar finalista con «Últimos días en Berlín» en el año 2021, la autora pasa a formar parte de la exclusiva lista de autores que han conseguido consagrarse en el difícil mundo de las letras de nuestro país.
«Soy el claro ejemplo de que persistir merece la pena» así iniciaba su discurso al recoger el premio.
Un discurso hilado de principio a fin en el que la gratitud, el reconocimiento del esfuerzo empleado en su labor, la ilusión que la guía y el amor fueron las ideas que más resonaron. Ideas que nos hacen pensar y reafirmarnos en que detrás de todo éxito siempre hay trabajo, mucho trabajo porque las cosas extraordinarias, nunca resultaron sencillas y difícilmente llaman a tu puerta si no pones todo de tu parte.
Además, reivindicó nuestro derecho a la información, como ciudadanos de una sociedad civilizada, a recibir información veraz y contrastada. Ello en alusión al título bajo el que presentó su novela a concurso.
En este artículo repasamos la obra de Paloma Sánchez-Garnica, su estilo, su nueva novela y te damos sobradas razones para considerar sus libros, siempre, como una fantástica opción de lectura.
Ni la abogacía ni una oposición, ni la geografía y la historia lograron separarla de lo que la vida le tenía reservado. Aún así en sus libros siempre se aprecia cuáles son sus pilares formativos, tanto el rigor histórico, como los principios que fundamentan el derecho occidental, consiguen abrirse un hueco en sus escritos de un modo u otro hasta convertirse en una de las patas de sus novelas.
Recuerdo haberla leído como firma invitada en la revista Telva cuando acababa de quedar finalista, a falta de un voto para el premio, en el Planeta de 2021 ( es más, esa página la arranqué y la tengo guardada en mi mesa porque aprecié muchas similitudes entre su vida, sus inquietudes y las mías).
En esa columna reflexionaba sobre ese giro de camino que la acercó a la escritura y cómo todo lo que había vivido hasta entonces la habían hecho llegar a este puerto. La vida no es el destino, la vida es el camino y las cosas llegan cuando tienen que llegar, como este premio Planeta ha llegado finalmente a ella con su novela Victoria.
Victoria
Victoria, presentada a los premios bajo el pseudónimo de Anna Ajmátiva y bajo el título «Buenas noches y buena suerte», es la novena novela de la autora.
La novela compone un retrato impactante de las vidas de aquellos que sufrieron en primera persona las consecuencias de las decisiones políticas que se tomaron en torno a la finalización de la Segunda Guerra Mundial.
La protagonista transita de un Berlín arrasado a Estados Unidos, un lugar que escondía una rancia capa de racismo e injusticias.
Victoria es una novela en la que el coraje, los principios y el amor marcan el rumbo de la historia en 480 páginas que prometen ser todo un disfrute para el lector.
A la venta el 6 de noviembre.
Leyendo a Sánchez-Garnica
Hay quien sitúa las obras de Paloma Sánchez-Garnica dentro de las novelas históricas. Razón nos le falta, el momento histórico es clave en el desarrollo de sus tramas. Además, el rigor con el que trata el marco temporal es propio de lo que es, una licenciada en Historia. Sin embargo, habría que puntualizar que aún siendo cierto, se aprecian matices en la lectura de sus libros que no hacen pensar en novela histórica al uso.
En sus libros lo personal siempre toma más peso. Las relaciones entre protagonistas, el momento vital de los mismos, las vicisitudes a las que hacen frente, cómo crecen, cómo decrecen…La persona y sus vínculos siempre terminan tomando la delantera al contexto histórico.
En sus obras terminan aflorando valores y principios que hacen que sus personajes se revelen ante situaciones, hechos y conceptos arraigados en la sociedad. Esta rebeldía, este inconformismo propio de los idealistas es otro eje que mueve sus narraciones y que atrae poderosamente al lector.
Las mujeres de Paloma Sánchez-Garnica, sus grandes protagonistas, son complejas, con sus luces y sus sombras, son fuertes o se hacen fuertes ante la necesidad. No se quedan en meros personajes, son personas, con sus cientos de aristas como cualquiera de nosotros.
Sus novelas son ágiles, fáciles de leer en el mejor sentido de la expresión. Atrapan, enganchan, 400 páginas que sorpresivamente no se hacen pesadas aunque el volumen sea considerable. Es así porque las tramas están bien construidas, son dinámicas y fluidas.
¿Qué leer de Paloma Sánchez-Garnica?
Nuestra recomendación empezaría con «Últimos días en Berlín» una obra fabulosa que, como ya hemos comentado, estuvo a un voto de ganar el Premio Planeta en 2021. En esta novela la autora desarrolla un triángulo amoroso en los últimos momentos de la Alemania nazi. Este libro recoge una historia muy visceral en la que los sentimientos y los comportamientos más básicos del hombre salen a la luz buscando sólo una cosa, la supervivencia.
» La Sospecha de Sofía» es otra de mis favoritas, su trama es arrolladora. Sofía, Daniel y Klaus entre Madrid, París y Berlín. No te contamos más y dejamos que la disfrutes libre de prejuicios.
» Las tres heridas» en la que un escritor encuentra una vieja caja de lata con fotografías antiguas. Esta novela entreteje dos tiempos, el actual y la Guerra Civil española. Una historia de amor, una búsqueda y vidas arrolladas por los acontecimientos.
«Mi recuerdo es más fuerte que tu olvido» una novela con la que la autora se hizo con el Premio Fernando Lara en 2016. Secretos familiares, mentiras e intrigas.
» La sonata del silencio» que fue llevada a la pequeña pantalla por TVE.
Además: El Gran Arcano, El alma de las piedras y La Brisa de Oriente.