Siguiendo la estética de los 2000 que tan en auge se encuentra ahora mismo, nos encontramos con el retorno del estilo boho. Ese estilo que imperaba en el inicio del streetstyle y que tenía en la figura de Siena Miller o Kate Moss sus máximas representantes.
El boho de los 2000 se inspiró en la moda de finales de los 60 y principios de los 70, en concreto en esa estética bohemia y desenfadada propia de la comunidad hippie. Las faldas largas, los tejidos vaposos, los chalequillos de ante, las mangas abullonadas, los flecos, sombreros o pañuelos de flecos eran las prendas y accesorios habituales. Todo esto ya lo hemos vivido, incluso mucho se quedó entre nosotros.
Ahora dicen que el boho vuelve con más fuerza que nunca de la mano de una de las firmas que más se ha identificado con esta estética, la francesa Chloé y su diseñadora creativa Amanda Harlech.
La colección presentada para este otoño-invierno resulta realmente interesante, además de la gama de colores que suaviza este estética tan marcada, hay prendas que son muy atractivas, como los abrigos con capelina ya sea en terciopelo, piel o algodón. Como hilo conductor de esta propuesta encontramos las cascadas de volantes en prendas muy vaporosas en las que reinan las transparencias. Prendas que hacen muy buen tandem con el punto o incluso del denim.
Ya sabes que en Protea no somos de entronizar tendencias, nos gusta que cada cual descubra su estilo, lo mime y lo potencie. Y en esta tendencia/colección hay bastante donde rascar.
¿Cómo incorporar el boho a mi día a día?
Prueba a combina prendas de este estilo con una base más clásica. Por ejemplo, a un pantalón sastre de tejido masculino, podrías añadir una de estas blusas vaporosas de volantes. El resultado puede ser fabuloso.
Las botas de caña alta y tacón grueso son uno de los accesorios más característicos de esta tendencia, sientan genial con faldas midi y silueta A.
Los vestidos largos estampados hacen muy buena pareja con blazers entalladas en terciopelo o paño en tonos sobrios y lisos.
También puedes adoptar detalles sutiles en accesorios como gafas de sol de grandes y ovaladas lentes, pañuelos con flecos o bolsos bandolera.