Tanto en esta ocasión como en el primer embarazo, he recibido algunas consultas sobre qué y cómo he preparado la maleta del hospital para el nacimiento del bebé. La verdad es que no es algo que haya preparado a conciencia, sólo he aplicado un poco de sentido común y he tenido claro en todo momento que si me hacía falta algo más, siempre estábamos a tiempo mandar a alguien a casa o salir a buscarlo a algún comercio.
4 pijamitas de primera postura. Pijamas de la talla 00. Aunque a veces es inevitable de lo pequeños que son, no me gustan que a los recién nacidos les sobre pijama por todos lados. En nuestra maleta he metido cuatro.
5 bodys cruzados de manga adaptada a la estación del año. Ya te conté que prefiero los bodys cruzados porque me resultan más fáciles de poner.
Un par de juegos de gorritos y manoplas. Para proteger su cabecita y para evitar que se arañe.
Un arrullo o toquilla. Aunque des a luz en época de calor, creo que es importante llevar toquilla para que se sienta más protegido, evitar corrientes….
Una toalla y su bolsita de aseo. Es normal que lo bañen en el hospital y usen sus productos pero por si acaso, llevamos los nuestros.
4 gasas o muselinas. Ya sabes que soy fan total de ellas porque sirven para todo.
Un par de conjuntos de punto, uno para el hospital y otro para la llegada a casa.
Bibi y chupete por lo que pueda pasar.
Pañales.
3 camisones. Uno para dar a luz y otros dos de muda. Mucho mejor que un pijama por el tema de los puntos.
Bata. Es habitual recibir visitas en el hospital y te sentirás más cómoda con una bata.
Ropa interior cómoda de algodón y no ajustada.
Zapatillas. Para el primer embarazo compré unas blancas preciosas y en esta ocasión he vuelto a repetir. Curiosamente lo que más recuerdo del nacimiento de mis hermanos son las zapatillas nuevas «de princesa» que llevaba mi madre. Así que me hace especial ilusión estrenar zapatillas en cada parto, una tontería, lo sé pero me gusta.
Bolsa de aseo habitual. No hay que llevar un arsenal de belleza pero tampoco renunciar a tener buena cara o el pelo arreglado. Por cierto, muy práctico un buen champú en seco.
Ropa cómoda y amplia para salir del hospital. Porque sales como embarazada de 5 meses y si crees que vas a enfundarte en unos vaqueros estás muy equivocada 😉
Documentación y pruebas médicas. Muy importante, nosotros las llevábamos en una carpeta portadocumentos para no extraviar ningún papel.
Hay madres que se sienten muy cómodas con la pelota de pilates, yo no la usé en ninguno de los dos partos pero es habitual llevarlas.
No me olvidaría la cámara de fotos. Es muy bonito tener fotos de las primeras horas de tu bebé. Las caras de los abuelos, los primeros gestos del bebé…Tú no saldrás muy favorecida pero es un recuerdo precioso para toda la vida.