Después de dos días muy vaqueros, hoy toca una pequeña reflexión…
A veces, una tiene que comerse sus propias palabras en muchos aspectos de la vida y en el ámbito de la moda, con más frecuencia quizás...
Eso es lo que me ha pasado con la colección que Juana Martín acaba de presentar en Cibeles. La diseñadora cordobesa empezó diseñando trajes de flamenca y eran bastante novedosos, más de lo que yo acepto en este terreno. Los trajes de flamenca vaqueros son demasiado para mí…Cuando empezó a diseñar ropa tampoco llamaba mi atención. Así que nunca estuvo entre mis favoritas. Pero la colección que acaba de presentar me ha encantado. Así que tengo que tragarme mis palabras y darle la enhorabuena.
Trajes de baño de estilo retro, con drapeados, lazadas, cascos, detalles de lo más coquetos. Ese magnífico bikini con plumas, es maravilloso…aunque a decir verdad, muy poco práctico…
Mariposas por doquier! Este pequeño animalillo primaveral es el protagonista de las prendas estampadas. Las verás en vestidos largos con faldas de vuelo infinito, en monos…
Los rosas pasteles han sido una constante en esta colección, mezclados con el eterno negro, haciendo un tándem perfecto. Cinturas muy marcadas para faldas fruncidas o para minis y encajes en camisas o rematando bajos.
Y además del negro, plateados. Me encanta el mono rosa, con escote estilo barco y pantalones bombachos. Y ese magnífico vestido largo con la chaqueta plateada….lo fichaba para más de una boda…
Pero éste no ha sido el único caso en el que he tenido que comerme mis palabras. Me acaba de pasar con el archiconocido Casio dorado. Ahora que está empezando a desaparecer de las listas de objetos más buscados, empieza a gustarme, después de meses y meses de rechazo…
Los pantalones de cuero, otros…me parecían «Catwoman» total, como ir disfrazada pero han ido haciéndose un huequecito poco a poco. Eso sí, nunca me quedarán como a Giselle, así que no sé si teminaré teniendo unos…
Con los botines, botas con cuñas me ocurrió lo mismo, me parecían zapatos ortopédicos pero al poco tiempo ya estaba yo buscando por Blanco estas sandalias….Otra historia amor/odio, es la de los pantalones pitillos y pantalones de campana. Cuando se llevan los pitillos, los de campanas me parecen imponibles y viceversa…
Las gafas estilo gatuno, los leggings….así una larga lista…
Qué cambiantes somos!!
¿Cuándo habéis tenido que comeros vuestras palabras?