Ya ha llegado la hora de ir pensando en Navidad. La verdad es que este año ni me he dado cuenta de su llegada, el otoño ha volado y me ha pillado totalmente desprevenida.
Los adornos siguen en el trastero, no hemos planificado las fiestas oficiales y los regalos…mejor no hablar de ellos.
Y a todo ésto, se suman multitud de cenas, comidas y demás reuniones que en muchos casos no no hacen más que complicarte aún más estos días de locos. Y viene a tu cabeza la típica pregunta «¿Qué me pongo?»
Como todos los años los escaparates de llenan de vestidos de lentejuelas, brillos, pedrerías…Yo, salvo excepciones, prefiero optar por algo básico, sencillo y dejar que brillen mis pies…
o mi bolso…
Y las piedras, las dejo para mis collares…
Que por cierto, acaba de incorporarse uno a mi colección que estoy deseando enseñaros, os encantará…
Besos!!