Dormí muy mal la noche anterior, los nervios se hacían notar. Me desperté temprano y empezamos a organizarlo todo. Una mañana realmente bonita recibiendo flores constantemente. Mis hermanos, mis padres, mis primos, mis tías, mis amigas, mis futuras cuñadas, mis futuros suegros, él, sus familiares, sus amigos… quisieron provocarme la más grande de las sonrisas y lágrimas de emoción al leer sus tarjetas llenas de cariño.
El tiempo pasó rápido y llegó la hora de montar las mesas…
Me vestí rápidamente porque él y su familia estaban a punto de llegar a casa. El vestido…
Y los pendientes, unas aguamarinas de mi madre…
Los regalos de pedida…
Fue un día realmente inolvidable, muy emotivo. Lo mejor fue estar rodeada de todos aquellos a los que quieres, notar su cariño, su emoción, su implicación en algo tan importante para ti. Los amigos y la familia son lo más preciado que tenemos, el mejor regalo que nos da la vida.
Con la pedida ha comenzado a correr el calendario para el gran día. Ese en el que me casaré con la mejor persona que he conocido y conoceré.
Y para terminar este relato, sólo me queda dar las gracias a todos los que nos acompañaron en un día tan importante, especialmente a mi madre, qué haríamos sin ellas!! Y también a vosotr@s por los comentarios y mails que he recibido, llenos de cariño y de los mejores deseos. Gracias!!!
( Ha resultado un post muy personal, espero que no os resulte inadecuado pero es tal la alegría que siento, que queda reflejada en todo lo que hago…)
Feliz lunes!!!!!!!!!!!