Leiva acaba de arrancar su tour Gigante en nuestro país y con apenas 3 conciertos en su haber, ya podemos afirmar que va a ser una de las citas musicales del año. Si tienes la oportunidad no puedes dejarlo escapar, vibrarás como debe vibrarse en todo concierto que se precie.
El pasado 30 de mayo en Toledo el músico Leiva arrancó su nueva y esperada gira. Después llegó Sevilla, donde 17.000 personas vibramos y nos emocionamos con sus nuevos temas y con sus clásicos de siempre. Próximamente serán ciudades como Burgos, Bilbao, Madrid, Badajoz, Valladolid… Y así hasta 30 conciertos.
La música de Leiva suena a música de verdad, a música de siempre. No es porque suene a Beatles, a Rolling, Burning o Sabina y sus influencias nos resulten familiares, que también, sino porque suena a música en directo.
La música de Leiva suena a bajo, batería, guitarra y voz. Música que llena y te hace vibrar. Esa música que consigue que el ritmo lata en tu interior.
En un panorama musical cada vez más encorsetado, artificial y manido, Leiva es casa para aquellos que nos hemos criado entre vinilos.
Pero para quienes no lo han hecho, también, porque si algo había entre las 17.000 personas que estábamos allí era variedad. Jóvenes y no tan jóvenes, pandillas, parejas, chavales de 15 años, jubilados…Un sinfín de categorías y rangos de edad movidos por un hilo común, la buena música, su buena música.
Después de encadenar temazo tras temazo nos dedicó unas palabras y nos confesó sus nervios, su responsabilidad y reconoció que el escenario es su sitio. Confesión que para nosotros era una absoluta evidencia, nadie como él con su sombrero y su inconfundible silueta para llenarnos el corazón.
Letras que con esa voz que envuelve y arropa, narran historias, transmiten angustia, superación, pureza y garra con un sonido exquisito por parte de la Leiband y sus técnicos.
Los directos de Leiva son el vivo ejemplo de cómo tiene que sonar un concierto y de lo que deberías sentir en un concierto. Si tu primer concierto es suyo, tendrás el listón demasiado alto el resto de tu vida.
Rock, baladas, clásicos de Pereza que nos hicieron volver a los 20 años y nuevos temas que ya nos han conquistado para crear una noche de esas que se graban a fuego en tu memoria.
Creo que ha sido el mejor concierto de Leiva de los que he presenciado y es que no hay duda que «…estás en tu momento de largo, puedes decirlo bien alto…«
Nos volvió a dar las gracias por comprar una entrada ( cosa que recuerdo desde hace años en todos sus conciertos) y nos volvió a pedir que apagásemos móviles y guardásemos silencio para escuchar una deliciosa «Vis a vis». Todo un deleite del aquí y ahora tan difícil de lograr más si cabe con semejante volumen de personas congregadas. Cuando terminó la canción, emocionado por ese momento mágico, nos volvió a dar las gracias por el respeto mostrado, Leiva eres un señor, un señor gigante.
Dos horas de concierto, sin prisa pero sin pausa, con un repertorio perfectamente seleccionado en el que sólo eché de menos sus nuevos temas 40.000 y Nevermind, canela en rama, creedme.
Versos para escuchar una y otra vez

«… y sus ojos como dos cerillas prendidas me miraban con miedo a ingresar por un tiempo en mi vida…»
» … he sacado a los demonios fuera con las mismas fuerzas que deseo encontrarte caminando en la vereda.»
» Si encontrara silencio en mi ruido mental dormiría 10 días y un año…cansado de avanzar marcha atrás»
«… ya no me reconozco y me importa bien poco…»
» … estoy sufriendo 24/7, no termino de encontrar nunca el contrapeso…»
«… de repente la ciudad huele demasiado a ti…»
«… ahora me muero por morder un pedacito del cielo de tu boca..»
«… llevo clavado en la memoria el recorrido de esa mirada rota, tú seguirás pensando que nadie lo nota…»
«…mis puntos más álgidos son sólo un espejismo y pongo el foco en lo que sigue ausente…»
«…te fuiste tan rápido que casi no me ha dado tiempo de extrañarte…»
«…me he acostumbrado a nombrarte sin querer una y otra vez…»
«… déjame saber si hay algo que ofrezca él que yo no pueda darte…»
Pensando seriamente en repetir, el tour Gigante ofrece exactamente lo que su nombre promete.
Sobre lo que debe sentirse en un concierto por nuestra querida editora invitada Isabel Cerdán