«Manual de Estilo Propio ( y de nadie más)» es el primer libro de Rosa Iglesias, un compendio de estilo en el que el principal objetivo es conseguir encontrar lo que te define y de ese modo ganar no estilo, que también, si no seguridad en ti misma.
De esto y más charlamos en esta entrevista…
Nos citamos en el recién estrenado y fabuloso Hotel Only You de Sevilla para hacer las fotos que acompañan a estas preguntas y a disfrutar de una charla cercana y sin cortapisas sobre estilo, evolución, proyectos, nuestras vidas y mil cosas más alrededor de un café.
Sus ojos vibrantes y sus labios rojos son su seña de identidad. Siempre es un placer hablar con Rosa, a nivel personal, es un diez, te lo puedo asegurar, fue una de las primeras personas que conocí «por estos lares». Evidentemente, a nivel profesional, no podría ser de otro modo, sobresaliente.
Rosa reúne profesionalidad, experiencia, instinto, sentido del humor, saber estar y una profunda empatía que hace que miles de personas confíen en ella para trabajar juntas en su «carta de presentación», su imagen.
Acabas de publicar tu primer libro “Manual de Estilo Propio” ¿ qué vamos a encontrar en él?
Mi Manual de tu estilo propio recoge toda la esencia de la filosofía estilaria. Además de ser un paso a paso práctico para entender, defender y disfrutar el estilo propio, es un tratado de estilo dirigido al alma. Porque de nada sirve tener un listado de todo lo que te puedes comprar y de lo que no, de lo que se lleva y de lo que no; si has perdido la conexión con tu yo interior. Por eso, es un acompañamiento completo en todo ese camino de transformación. No en vano, el estilo propio es clave en la comunicación no verbal.
¿Cómo llama una editorial a tu puerta y cómo respondes a ello? ¿Estaba entre tus objetivos escribir un libro algún día?
Llamó de forma inesperada. Y de hecho, cuando lo hizo, no me lo creí y tardé en responderles. A pesar de que llevo muchísimos años en esto y escribiendo primero en el blog y luego en instagram, no podía creerme que esto me estaba pasando a mí. Porque sí, escribir un libro sobre El Estilario era uno de mis sueños.
¿Ha resultado sencillo o, por el contrario, ha supuesto todo un reto?
Ambas son ciertas. Es un reto porque resulta complicado darle forma y hacer accesible un mensaje que tengo interiorizado desde hace tantos años. Pero ha resultado mágico y revelador al mismo tiempo.
Este libro es como tú, se aprecia tu determinación, tu energía, tu sentido del humor ¿Crees que esa autenticidad es la clave de “ El Estilario”?
Yo creo que sí. La comunidad estilaria se identifica con mi naturalidad. Nunca hay filtros de ningún tipo y esa naturalidad es la esencia de El Estilario: no existe nada más bello y único que el mero hecho de ser una misma.
Cuéntanos cómo y por qué nació “El Estilario”
En mi cabeza nació en el año 2003, en el que se me ocurrió que si en EEUU ya existía esa figura del Personal Shopper y del Style Advisor aquí también podría encajar. Es cierto que en aquel momento, cada vez que comentaba la idea, me miraban sin comprender demasiado de qué iba… por eso, cuando en 2008 en Sevilla conocí a una pequeña e incipiente comunidad de bloggers de moda, aproveché para probar. El blog era una herramienta gratuita, así que no se perdía nada probando esta idea. Pero lo hice además, desde una perspectiva que rompiera la frivolidad normalmente asociada al sector. Con mucha ironía, sentido del humor, soluciones reales… y de una forma visual a través del #noseteocurra.
¿ Y cómo ha sido su evolución hasta ser lo que hoy es?
Ha sido natural porque El Estilario ha ido creciendo de la mano de las estilarias. Del blog salté a los servicios presenciales porque comenzaron a solicitarse. Y cuando estos ya sobrepasaban la capacidad de mi agenda, ya fue el momento de crear la plataforma que hay hoy y que aglutina los cursos, las asesorías y el servicio de membresía Privilegio Estilario.
Tienes una de las comunidades más bonitas que conozco en redes ¿Podrías definirnos el perfil de tus seguidores?
Son mujeres maravillosas de alrededor de 40 años que viven un punto de inflexión en su vida. Todas conectamos en esencia. Las siento a todas cerca, me demuestran su cariño y apoyo y yo las quiero mucho.
¿Crees que la omnipresencia de las rrss ha cambiado la relación de las personas con la moda?
Tiene su lado positivo porque tenemos a mano muchas ideas y opciones, conocemos nuevas marcas, conectamos con marcas artesanales, pequeñas, de factoría nacional… pero al mismo tiempo tiene su cara B porque la sobresaturación de contenido tiene en ocasiones un efecto bloqueo que genera frustración de armario e imagen. Y además, el borreguismo (todas las personas vistiendo de una manera muy similar) se extiende con más facilidad y se olvida el valor de la esencia propia y de la personalidad.
A nivel personal ¿Cuál es tu relación con la moda y qué te llevó a ella?
Siempre me ha gustado muchísimo, desde muy pequeña. Quise ser diseñadora de moda, quise aprender a coser, dibujar figurines… hasta que la tomé desde el ángulo que más me gusta que es el de la comunicación no verbal. La necesidad de ayudar a personas a reconectar consigo mismas disfrutando de la imagen a través de las herramientas de la moda.
El estilo ¿nace o se hace? Basándote en tu experiencia con las personas que acuden a ti ¿tan importante y tan difícil es alcanzar “el estilo propio”?
Es uno de los capítulos del libro, además. El estilo claro que nace, pero también se hace. Yo entiendo el estilo propio como una especie de marca personal (ahora que está tan de moda el término) por eso conocer el de cada uno es fundamental porque funciona como una especie de toma de tierra.
¿ Es posible perder el estilo? A veces parece que las personas sufrimos acontecimientos o catarsis que ponen a temblar todo nuestro mundo, incluso nuestra manera de vestir y presentarnos a la sociedad ¿Te encuentras con este perfil a menudo en tu trabajo y cómo lo gestionas?
Sí. Se pierde porque nuestra vida cambia y es normal que en esa evolución perdamos esa conexión con nuestros cambios físicos o emocionales. Es además, uno de los trabajos que realizo más a menudo.
En psicología se habla a menudo de creencias limitantes ¿crees que es un concepto que podemos aplicar a la moda?
Sin duda. Somos muy tiranas con nuestra propia imagen y por eso tendemos a quedarnos atrapadas en los NOES. En el “no puedo, no me queda bien”, en lugar de probar y de analizarnos en conjunto. Sin esas creencias limitantes se disfruta mucho más de la imagen propia y de las herramientas que nos facilita la moda.
A aquellos que consideran las cuestiones de estilo una frivolidad ¿qué les dirías?
Verse bien y cuidarse es el mayor acto de amor propio que hay. Y no hay nada que el amor no pueda mejorar, salvar o solucionar.
¿Cuánto de psicología hay en tu trabajo?
Mucha. De hecho, mis lecturas y formaciones profesionales van siempre orientadas en ese ámbito. Siempre digo que la moda y las tendencias son las herramientas que utilizo en ese proceso de reconexión y disfrute de la imagen personal.
¿ Cuáles son los servicios que ofreces?
Las asesorías de imagen (tanto presenciales que suelo desarrollar en Sevilla, Madrid y A Coruña fundamentalmente) son los más populares. En ellas, acompaño a la clienta en el proceso de conocimiento de sus proporciones, colores, estilo… para descubrir lo que más le favorece y para que aprenda a combinar su ropa. Aprendiendo a comprar y sobre todo, aprendiendo a combinar y sacarle más partido a su ropa. Otro de los servicios son las formaciones, que también realizo de forma presencial y online, sobre colorimetría, compras sostenibles, imagen personal… Y por último, Privilegio Estilario que es el servicio de suscripción premium y que incluye dos mails semanales que ayudan a ahorrar tiempo a la hora de comprar (con una selección de fichajes estilarios), resuelve dudas de estilo, soluciones de armario, casos prácticos, etc.
¿Cuál es el perfil de tus clientes? ¿Qué suele buscar un cliente que contacta contigo?
Mujeres en torno a los 40 años que quieren disfrutarse de nuevo o desean reafirmarse a través de la ropa. En mí buscan esa realidad sin apariencias, la practicidad y conseguir una elegancia natural sin impostar.
No puedo evitar pedirte que nos des tres ideas básicas para empezar a encontrar nuestro propio estilo…
Siempre digo que es una combinación de espejo, cribar y probar. Espejo porque es elemental dominar y querer la percha sobre la que vamos a trabajar. Cribar porque un armario lleno de retales de otras épocas es un continuo escollo con el que es difícil trabajar. Y probar. Porque nuestra cabeza está llena de falsas imágenes que solo podemos corroborar o romper si probamos y verificamos.
Es bastante común plantarse delante de armarios repletos de ropa y pensar “No tengo nada que ponerme” ¿Cómo podemos poner solución a nuestros armarios además de pidiéndote ayuda?
Con espejo y cribado, como dije arriba.
Si actualizamos nuestra imagen mental y entendemos lo que nos define en la actualidad (no solo morfológicamente, también es una cuestión de gusto personal o de estilo de vida) podremos comprender si hay ropa que está calentando banquillo pero no volverá a salir al terreno de juego porque ya poco a nada tiene que ver con nosotros.
Después de más de 10 años en activo cuentas incluso con un “glosario” propio. Me fascinan los “no se te ocurra”, háblanos de ellos…
Nos #noseteocurra son la base de la filosofía estilaria. Porque por un lado son esa ironía y sentido del humor para quitarle hierro a la frivolidad de la moda. Porque humanizan la moda y porque generan ese sentimiento de pertenencia, del “a mí también me pasa eso”.
En tu libro nos hablas de la importancia del espejo, objeto que se relaciona con narcisistas o vanidosos ¿Cómo salimos de esa falsa creencia?
Comprendiendo que quererse, echarse piropos a una misma, alimentar nuestro guapo subido, tiene más de autocuidado y amor emocional que de narcisismo.
¿Qué opinas de los archiconocidos “armarios cápsula”?
Que existen y son fabulosos pero no existe uno genérico. No hay una fórmula exacta para todo el mundo porque afortunadamente somos muchas personas distintas y eso es lo divertido de todo esto. Armario cápsula entendido como ese andamio de armario que articula todo lo demás que vayamos comprando y que recoge nuestra esencia: sí. Ese concepto me encanta.
¿Qué es eso de la “tercera prenda”?
La tercera prenda es el toque mágico que eleva un look básico y sencillo y que por tanto, permite que tengamos armarios más ligeros sin renunciar a vestir de forma más personal. Es cualquier elemento que sumamos a dos piezas de base (por ejemplo, camiseta + pantalón) y que puede ser un cinturón, un pañuelo, unos zapatos, un bolso…
Es inevitable madurar en sentido estético a la vez que maduramos como personas ¿crees que es posible adelantar esa madurez estilística a los jóvenes en esta era del “fast fast fast fashion” ? ( repetir tres veces el término fast es intencionado, jamás hubo moda tan rápida como la de hoy)
Es complicado porque las redes sociales no ayudan. A mí me resulta increíble que una época en la que existe mayor acceso a contenidos sobre tolerancia o medio ambiente, por ejemplo, seamos tan intolerantes y tan poco eco responsables. Y más me sorprende viendo las reacciones, actitudes y tendencias de los jóvenes ahora. No de todos, pero sí de una amplia mayoría. Ojalá la polarización fuese en otra dirección, pero por desgracia con demasiados los haul que se ven en redes sociales primando la cantidad de prendas baratas y fomentando la necesidad de renovación y rotación de las mismas.
¿ Qué opinas de las plagas? Ese vestido que aparece de repente en nuestro campo de visión y acabamos viéndolo más a menudo que nuestra mejor amiga.
Siempre he sido anti plaga porque la tendencia la utilizo para divertirme. Así que algo de lo que ya estoy empachada no me resulta divertido.
¿La moda te crea algún tipo de conflicto? ¿Cómo lo gestionas?
No, ninguno. Porque la moda me divierte. Me gusta el arte, me gusta la belleza, me gusta lo equilibrado. Y en eso centro mi atención. Todo lo que esté fuera de ese círculo, no lo consumo.
Completa la frase…
En un armario nunca debe faltar… Orden. Una prenda en concreto no podría decir porque depende de cada persona. Pero lo que es común a todas es el orden porque así siempre sabemos todo lo que hay y no hay margen para compras erróneas ni tampoco para no exprimir lo que tenemos
Di no a … ropa sosa, ropa avejentada, con pelotillas o con manchas
Mayor error estilístico… llevar ropa que no te defina, con la que te sientas disfrazada
Un icono de estilo… Jackie Onassis o Inés de la Fressange
De las épocas de la moda, tu favorita… Me gusta mucho la época de los años 40 porque era moda del ingenio. Pocos colores, poca riqueza de tejidos, pero usando el ingenio del estilo y exprimiendo el armario con lo que había
El mejor de los accesorios…la calidad. Todo lo que no resulte al menos, aparente, se carga un look. Y si vamos a uno en concreto: los zapatos. Hablan muchísimo.
El diseñador más revelador que haya existido… Balenciaga porque defendía una máxima en la que siempre me centro. Más que tener un armario lleno de colores y estampados, apostar por tejidos de calidad y por patrones y diseños especiales.
Si pudieras añadir alguna prenda o accesorio icónico a tu armario sería… el vestido negro de Givenchy para Audrey Hepburn