Organizando una fiesta…

Buenos días!!
¿Qué tal ha ido vuestro puente? Espero que de un modo u otro hayáis podido disfrutar, descansar y salir un poco de las rutinas, que al fin y al cabo, es lo mejor de estos días.
El mío ha ido de maravilla y ahora contando las horas para el próximo que tampoco queda tan lejos.

Hoy os traigo algunas cosillas de la fiesta de mi cumpleaños. Todo lo relativo a organización y decoración. 
Me da rabia no tener más fotos para enseñaros pero con todo el lío que supone organizar algo así, en lo último que piensas es en pillar la cámara para capturar detalles. Una lástima…La próxima vez no me pasará.
Cuando organizas una fiesta de 40 personas en tu casa, hay muchas cosas a tener en cuenta y si además lo celebras en una azotea, muchísimas más. Así que lo primero que hice fue agenciarme un cuaderno e ir apuntando todo lo que se me pasaba por la cabeza.
Hice dos grupos principales de ideas, comida y organización. Y cada uno a su vez lo dividí en secciones:

El tema de la comida fue el que más trabajo me dio. Decidir qué vas a preparar, la gran compra en el supermercado y dos días metida en la cocina con el horno y los fuegos siempre funcionando, es lo peor de este tipo de celebraciones.
Aún así tuve la gran suerte de recibir ayuda por parte mi madre, mi suegra y mi cuñada quienes se ofrecieron a hacer algunas cosas. 
Montamos varias mesas en las que pusimos los platos para que cada cual se sirviera en plan buffet y los platos estaban señalados con cartelitos que yo mismo hice con con cartulinas, mis tijeras de ondas y palitos de madera.
Luego sustituimos los salados por los dulces y los más golosos se pusieron las botas porque había muchísimo donde elegir.
No sé si os fijasteis en el otro post en una de las tartas. La encargó mi cuñada para regalármela, se trataba de una de las cajas de los tocados de MiejiCollection con su cinta morada y todo y sobre ella un zapato (ya conocéis mi debilidad por ellos) que además estaba etiquetado con nuestro nombre. Me encantó!
Además, tarta de zanahoria, tres chocolates, golosinas, pastas…

Las bebidas fueron otro de los quebraderos de cabeza
¿Cómo mantener fías las bebidas en una azotea en la que no hay instalación eléctrica?
Pues comprando grandes barreños de zinc y llenándolos de agua y hielo. Además de práctico resulta decorativo, así que solucionamos dos problemas de un plumazo.
Para decorar la fiesta, opté por tonalidades burdeos y rosas. 
Compré telas que luego corté para hacer manteles (si las cortas con las tijeras de ondas no tienes que preocuparte por hilos y demás, quedarán como terminados)
Éstas fueron mis opciones:
También encargué pompones de seda a Made with Lof para ocultar las pareces de la azotea y adornar la mesa principal:
Y no podían faltar flores, así que compré un par de ramos de paniculata que luego distribuí en pequeños centros que no eran más que vasitos de yogur de cristal con unos lacitos:
Pero aún así, hacía falta verde. Así que encargué a mi madre que cortara de su jardín ramas de hiedra, muchas ramas de hiedra!! 
Las pusimos en jarrones de cristas y las prendimos en los manteles, así transformamos una azotea triste y apagada en lo más parecido a un jardín, al menos tanto como nos fue posible.
Quería que la fiesta fuese cómoda de montar y recoger, por eso, aunque usamos mis fuentes y tarteras, compré platos, cubiertos y vasos de usar y tirar. 
Aun así preciosos: 
Los cubiertos los puse en botes de cristal y me encantó el resultado.
Un bote de crital, una blonda doblada por la mitad y un trozo de tela para adornar y sujetar el cubierto. 
Fácil y resultón!
Y poco más, que el tiempo acompañe y que no falten amigos y familia que son lo importante…
Algunos consejos si vas a celebrar una fiesta en casa:
–  Si tienes la oportunidad, deriva platos. No rechaces la ayuda de quienes se ofrezcan porque además, los platos por los que optan son sus especialidades y no sólo eres tú quien sale ganando, quien los prueba también.
– Si el número de invitados es elevado recurrir al alquiler de mobiliario es una buena opción. Nosotros alquilamos sillas de madera, mesas y sombrillas. Los llevan a casa el día antes y lo recogen el siguiente. (Eso sí, comprueba el estado, tuvimos algunos problemas con las sombrillas)
– Usa la imaginación. Seguro que en casa tienes mil cosas con las que puedes contar para montar una fiesta, desde unos vasitos de yogur a unos cubos de zinc, una mesa auxiliar o incluso cestos, cuadros o espejos.
– Madruga el día de la fiesta, aunque estés cansada, madruga porque yo remoloneé un poco y luego me quedé sin poder hacer fotos y preparar algunas otras cosas que tenía en mente.
Espero que este post os haya aportado alguna idea si estáis preparando una fiesta en casa, cosa que es un lío pero que merece muchísimo la pena.
Y tú…
¿Algún truco para hacer grandes celebraciones en casa?
Feliz lunes!!