Cuando empezaron a llevarse los pantalones tipo chándal (Sporty Chic, lo llaman en las revistas) me horroricé. Pensé que era una tendencia que definitivamente no estaba hecha para mí. Sin embargo, en moda la única negación que puede hacerse es «Nunca digas nunca» y como suele pasar en estos casos, caí en sus redes y ya no hay quien me separe de ellos.
La verdad es que estando embarazada es una opción más que recomendable. Con ellos estás cómoda, no hay presiones, ni ajustamientos…En fin, que cuando vi estos pantalones en las rebajas de Oysho hice muy bien en comprarlos pensando en un embarazo más avanzado y en la próxima temporada.
Ya sabéis porqué se me fueron los ojos detrás de ellos, no? Pues sí, sus rayas. Es cierto que unas rayas horizontales no son la mejor opción ahora que estás más ancha de lo normal, pero no sé, éstos tienen algo que me encantan…
{ Camiseta: H&M/ Camisa: Zara/ Pantalones: Oysho/ Bailarinas: Menbur/ Bolso: Purificación García}
No quiero terminar sin daros las gracias por vuestra difusión del post de ayer. Ojalá con estos pequeños gestos consigamos pronto un hogar para esos perritos y concienciar un poco a la sociedad de este problema.
Gracias, de corazón!
Hasta mañana!!
