Llevamos meses preparando su llegada, a todos los niveles.
Semanas y semanas leyendo todo lo que caía en nuestras manos, preparando su habitación, su ropita, disfrutando de cada momento y, a la vez, esperando ansiosos ver su carita.
Aún así nunca imaginé que la maternidad fuera de esta manera, que se sintieran las cosas que se sienten. No imaginaba que pudiera pasar horas contemplándolo, acariciando sus manitas o disfrutando de su aroma.
Es un amor tan grande, tan delicado y tierno que es ahora cuando me doy cuenta de cómo quiere una madre, de lo mucho que me quiere mi madre…
Estos días sólo puedo estar agradecida a Dios por este gran regalo que nos ha hecho, por compartir mi vida con un hombre tan extraordinario, por tener las familias que tenemos….AGRADECIDA.
Y agradecida también a vosotros, por todas vuestras felicitaciones, enhorabuenas y gestos de cariño de estos días atrás. Han significado mucho para mí, de corazón.
Mil besos!!